CELEBRANDO EL DÍA DE LA POESÍA

SECCIÓN: Érase una vez en La Granja…

Miércoles, 10 de abril. 2024

Este es el rincón dedicado a uno de los centros de León capital que se ha convertido en colaborador de este blog. En él, y con una frecuencia de cada cuatro semanas, se asoman los miércoles a esta sección que han titulado como «Érase una vez en La Granja…», para contarnos, desde el equipo didáctico del CEIP La Granja de León, sus diversas experiencias en torno al mundo de la Literatura en el aula, tanto desde el punto de vista de la creación como desde la lectura. Os animamos a descubrir sus iniciativas y esperamos que esta experiencia de colaboración se vaya contagiando a otros centros diferentes a lo largo y ancho de nuestra geografía. Si os animáis, os aseguramos que seréis muy bien recibidos.

Érase una vez en La Granja… que llegaba la primavera, que llegaba el Día del Árbol, que llegaba el 21 de marzo y nos pusimos a la tarea de celebrar este día porque también era el DÍA DE LA POESÍA.

Como todas las actividades que hacemos en el colegio su eje principal fueron las emociones. Programamos para esta fecha una velada poética en la que, de manera voluntaria, el alumnado escogiera una poesía que le transmitiese una emoción para leer a los demás.

Nos reunimos por ciclos en el Salón de Actos del colegio para leer y escuchar poesías. Dependiendo de las edades cada grupo recitaba o leía un poema (a veces en grupo, a veces de manera individual). Los docentes también aportamos nuestro poema y comentamos al alumnado porque habíamos elegido ese en concreto y no otro y que emociones nos transmitían.

El alumnado de Educación Infantil, tanto del primer ciclo como del segundo, también participó de este día recitando poesías que habían aprendido previamente en clase.

El alumnado de Educación Primaria recitó poemas en grupo en el primer nivel, leyeron poemas de manera individual que les habían ayudado en casa a elegir o que ya conocían y les gustaba.

Fue muy bonito comprobar que nuestro alumnado se “emociona” con la poesía y con las emociones que otros compañeros y compañeras les transmitían con sus lecturas.

Se recitaron poemas conocidos y otros menos famosos, pero de todos ellos supimos sacar alguna emoción; aunque no siempre fuera una emoción positiva.

Acompañando a las lecturas proyectamos imágenes como si fueran una película con una música suave de fondo que ayudase a entender lo que estábamos escuchando.

Niños y niñas animándose a la participación

Descubrimos que al alumnado les gusta expresar sus emociones y que les encantó hacerlo a través de sus poesías…; por ello, el siguiente paso podrá ser lanzarnos a plasmar en un papel nuestras emociones escribiendo nuestros propios poemas, pero eso ya será historia de otra colaboración.


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